Ippon es un término japonés que se emplea en algunos deportes de combate de origen nipón como el judo y el kárate entre otros.
En judo el ippon significa que la técnica ha sido perfecta y uno de los rivales ha demostrado su superioridad técnica sobre el contrario. Además, el Ippon implica el fin del combate que se marca con la voz japonesa "soremade".
Se puede lograr un ippon de cinco formas:
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(1) Cuando se proyecta al contrario empleando una técnica de pie perfecta y que hace que el adversario caiga de espaldas.
(2) Por la acumulación de dos Waza-ari o medios puntos, ya que dos Waza-ari equivalen a un Ippon. Se puntúa Waza-ari cuando el adversario es proyectado sin que llegue a caer completamente de espaldas.
(3) Al inmovilizar al adversario durante un tiempo determinado, habitualmente 20 segundos, o si el judoka se rinde antes de ese tiempo golpeando sobre el tatami dos o más veces de forma ostensible.
(4) Realizando una técnica de luxación o de estrangulación que provoque el abandono del adversario golpeando el tatami. En este caso no hay limitación de tiempo salvo que el árbitro observe que existe riesgo para la salud del judoka.
(5) También se puede obtener un combate por descalificación del adversario tras ser sancionado con Hansoku-Make. Esta sanción se marca por falta de competitividad reiterada, por acumulación de sanciones menores o por faltar al espíritu de las normas del judo o realizar conductas antideportivas. Un Hansoku-Make supone la concesión de un ippon al contrario.
Se acompaña esta entrada con un espectacular vídeo que repasa la trayectoria del judo en los Juegos Olímpicos desde su estreno en Tokio 1964 donde el gran Anton Gessink, contra todo pronóstico, obtuvo el oro en la categoría Open.
En el vídeo podemos comprobar un buen repertorio de ippones que demuestran la esencia y espectacularidad de un deporte universal que seduce a millones de personas en los cinco continentes y que tiene una tradición más que centenaria.
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