El término motivación proviene del latín motio-motionis que significa movimiento u origen del movimiento.
La motivación es aquello que impulsa o mueve a hacer algo, normalmente con el fin de satisfacer una necesidad.
La motivación es una mezcla de pasión, propósito, toma de decisiones y compromiso. Es un nivel profundo de la conciencia que genera energía y vida para desempeñar adecuadamente en la actividad que a uno le ocupe. La motivación es tener pasión por vivir, es nuestra propia recompensa por nuestro buen desempeño.
Una persona motivada está dispuesta a correr riesgos y tomar decisiones que otros no harían por miedo al fracaso. La motivación también nos otorga compromiso, que es la clave para convertirse en una persona de alto nivel de eficacia y eficiencia, tanto en el ámbito deportivo que es el que nos ocupa en este momento, como en el personal o en el profesional.
Rafael Nadal es un claro ejemplo de éxito deportivo basado en el trabajo duro y el talento |
La motivación nos llena y nos da un sentido de logro y control, por lo que una persona motivada ama lo que hace y hace lo que ama. Debemos de forma frecuente revisar nuestro nivel de motivación y si está bajo debemos hacer lo necesario para llenarlo. ¡Este es nuestro reto!
¿Cómo influye la motivación en el deporte? ¿Y en la vida? El papel de la motivación en la actividad deportiva es clave, mucho más cuanto más exigentes sean los objetivos a conseguir.
La motivación debe ocupar una parte central en la fase del entrenamiento para aumentar la intensidad y lograr la mejora del rendimiento posterior. En el momento de la competición la motivación se manifiesta en la capacidad de concentración y la focalización de las actuaciones orientadas a la consecución de los objetivos dicha competición.
Diego Pablo Simeone. <<La motivación como arma>> |
Los grandes deportistas tienen una solidez de carácter y una motivación para la victoria excepcionales. Estos aspectos del carácter se encuentran también en muchas personas que sin ser deportistas unen esta actitud vital a sus capacidades específicas como puedan ser las comerciales, artísticas, científicas o políticas entre otras y que constituyen la base del éxito en un determinado campo social o laboral.
Sin embargo hay una gran diferencia entre el campeón deportivo y lo que podríamos entender como un "campeón en la vida". Mientras el primero puede alcanzar la excelencia deportiva en edad juvenil, incluso en algunos deportes como la natación o la gimnasia a una edad aún más temprana, la consecución de los objetivos vitales exigen una mayor experiencia y una maduración intelectual mucho más prolongada.
La tolerancia a la frustración es imprescindible para el desarrollo psíquico equilibrado del individuo |
La ambición de alcanzar metas cada vez más importantes se traduce, por lo tanto, en una filosofía muy sencilla que es válida para todo hombre o mujer independientemente de su valor absoluto, en las distintas actividades de la vida: "Hay que luchar para mejorarse a sí mismo". Si entendemos ésta como la única comparación válida, los modelos de los campeones deportivos son los que mejor interpretan esta filosofía de vida.
Se adjunta con esta entrada un magnífico vídeo en el que se aprecia la inseparable unión entre el trabajo y el éxito deportivo con la motivación como nexo de unión entre ambos conceptos.
Motivación deportiva y personal (3m18s)
Entrada elaborada por: Jorge Barrio
Calificación: Excelente
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